Las 3 claves que harán que tu curriculum sea muy bien valorado
La búsqueda de empleo es un proceso dominado por una alta competitividad, donde un empleador posee la alta urgencia de ocupar un puesto vacante con un personal totalmente capacitado con todas las habilidades, experiencias y aptitudes para lograr un excelente desempeño. La elaboración de un documento de síntesis curricular, construido y maquetado de manera eficiente, y que pueda resumir todas nuestras habilidades laborales de una forma coherente y concisa jugará en favor del logro adecuado de dicho proceso.
Estadísticamente todo ello implica la eliminación de un 90% de las solicitudes insertadas en la primera ronda de reclutamiento. Un currículo completamente efectivo, siempre quedará dentro de ese 10% de posibilidades solo si es capaz de por sí mismo reflejar actitudes como logros específicos, experiencia relevante y el grado de personalización que el postulante a su hoja de vida le haya podido otorgar.
No se trata de escribir una novela. ¿Y Tu que venderás?
Estructura de síntesis, con capacidad para destacar logros laborales.
Se trata del primer rasgo informativo mayormente valorado dentro de las empresas y del mercado actual. Estadísticamente se calcula que un 48% de las oportunidades ofrecidas en el mercado se encuentran en búsqueda de perfiles que cumplan con dichas características. Una excelente manera de maquetar la información para la facilitación en su proceso de lectura es el uso de viñetas o listas numeradas. Tal distribución debe ser nutrida mediante la utilización de párrafos cortos donde se incluya a manera de hechos concretos, los logros y aportes realizados a cada corporación donde se ha trabajado de manera previa.
Información organizada y enfocada en el puesto de trabajo a obtener.
Gran parte de la legibilidad y buena impresión causada por la lectura de un currículo, no solo depende de la importancia de la información contenida en él. Si no además, por la forma en cómo ha sido estructurada. Para un empleador, solo bastará la presencia de los cinco elementos fundamentales como datos personales, perfil profesional, formación académica, experiencia profesional y habilidades y destrezas. Un error general que conlleva a todo currículo a no ser seleccionado es la falta de personalización o a la generalización de su cuerpo de datos. Se recomienda que para lograr resultados efectivos, es necesario leer las cualidades pedidas por la vacante y desarrollar un documento donde se reflejen las conexiones entre lo solicitado y las experiencias relacionadas que el candidato haya podido poseer de forma previa.
Inclusión de palabras clave.
Aunado a todo este perfil de criterios informativos, las palabras clave constituyen otro recurso que los empleadores suelen citar para proceder con la aplicación de herramientas de selección. Para la utilización adecuada de este tipo de términos, es necesario tener en cuenta de que se tratan de artificios que difieren en gran medida de una industria a otra, pero que sin embargo son capaces de reunir elementos comunes como los verbos de acción. El uso de palabras como diseñe, capacite, aumente y desarrolle, es algo que de ninguna fórmula efectiva debe quedar excluido. Luego, a manera complementaria, deben incluirse datos clave sobre áreas como resolución de problemas, liderazgo, habilidades de expresión tanto oral como escrita, proactividad y trabajo en equipo.
Apuntes Finales: Otros importantes consejos que aumentarán las posibilidades de que todo currículum sea seleccionado.
La ausencia de errores ortográficos juega en favor de estos elementos, de allí que siempre sea importante que el documento ya elaborado sea corregido o revisado por manos terceras, de forma posterior a su elaboración. La presencia de este tipo de elementos, junto con una deficiente y poco acabada construcción de frases, podría hacer percibir a la persona como poco profesional o escasamente capacitada para el desarrollo de su puesto.
Para la construcción de un tono profesional, siempre se requiere el uso de tecnicismos, lo cual implica el abandono del contexto social a favor de un lenguaje más especializado. En gran medida ello inspira confianza a la hora de la delegación de responsabilidades, así como además de ser un criterio exigido en el 95% de los casos de contratación en el actual mercado laboral internacional.