La escucha activa marca tu gran diferencia como líder

escucha activa

Para comunicar y transmitir es mejor escuchar que hablar.

Todos sabemos de la importancia de saber escuchar. Ahora bien, ¿sabemos hacerlo?

La capacidad de escucha es una habilidad, y como tal se puede entrenar. Y es una habilidad que hoy se presenta como fundamental e imprescindible para ser un buen líder.

La escucha activa ofrecen a un buen líder las dosis necesarias de humildad, cercanía e integridad para generar la confianza que debe haber entre los miembros de su equipo.
Por otro lado, además la escucha nos permite conocer más y mejor, saber, aprender…

Existen cuatro razones fundamentales por lo que la escucha se convierte, dentro de una organización, en una actividad y valor que marca la diferencia:

Escuchar tiene un propósito

Saber lo que se quiere conseguir cuando comenzamos a hablar o iniciamos una conversación con alguien.

Escuchar requiere atención y control

Para asimilar la información que recibimos y relacionarla con el propósito del que hablaba.

Escuchar requiere enfoque e involucración total

Para desenvolvernos en la conversación es necesario cierto grado de concentración que nos permita participar y plantear las cuestiones adecuadas.

Escuchar es la primera línea del proceso de toma de decisiones

La escucha nos permite recopilar toda la información necesaria y relevante para la toma de decisiones.

¿Es posible entrenar la escucha?

Indudablemente. A continuación te expongo algunos consejos útiles para comenzar a entrenar esta habilidad:

Consejos para entrenar la escucha

  • La ley del 80/20, en este caso, también es válida y efectiva. Escucha un 80% y habla un 20%.
  • Practica en tus conversaciones el enfoque de la misma. Céntrate, pon la atención y dirige la conversación hacia el tema que se está tratando.

 

Teniendo claros los anteriores concepto y premisas, es posible mejorar nuestra capacidad de escucha para evolucionar hacia ese líder que queremos ser, con recursos y herramientas suficientes para la gestión del cambio en nuestro entorno.

En un principio requiere de práctica, pero lo cierto es que son tantas las ventajas y lo que facilita la escucha, que una vez se empieza  implementar en las conversaciones, no resulta complicado adquirirlo como hábito.

Te animo a poner los dos consejos anteriores en práctica… estoy seguro que tusconversaciones mejorarán esta práctica te ayudará lograr mejores resultados.