¿Por qué los directivos de las empresas huyen de las redes sociales?
No sólo se ve en España. Aproximadamente el 61% de los ejecutivos más poderosos del mundo no tienen presencia en las redes sociales. Así lo indica un estudio de la agencia de comunicación española “Eureka PR”, que recoge los principales motivos por los cuales los directivos de importantes empresas huyen de estas plataformas tecnológicas.
Los directivos participantes en el estudio hacen parte de importantes compañías con el mayor volumen de facturación en España. La gran mayoría de ellos no tienen perfiles personales en Facebook ni en Twitter.
¿Por qué los directivos de las empresas huyen de las redes sociales?
El estudio recoge la opinión de importantes consejeros delegados y CEO de empresas cuyas facturaciones en redes sociales son muy altas. Estas son las principales razones:
- Estas herramientas suponen más una distracción o una carga, que una ventaja real para ampliar el nivel de confianza de los usuarios en su marca.
- Tienen recelo con su vida e información personal.
- Están prevenidos y miedosos al pensar que por redes sociales puedan recibir críticas, ser cuestionados o dejar en evidencia opiniones personales que vayan más allá de la imagen pública de la compañía y de sus protocolos.
- Estiman que no es ni necesaria ni beneficiosa su presencia en este tipo de plataformas.
- No les agrada exponerse en canales sociales. Prefieren la prudencia, valor que poco se aprecia en las redes sociales.
- El mismo sector en el que trabajan puede no tener buena aceptación en el público por temas de incrementos de tarifas, impacto medioambiental, etc. Estos factores podrían suscitar críticas o insultos sobre su gestión. Prefieren evitarlas.
- Consideran que las redes sociales no son un valor seguro sino un entorno desgobernado donde una declaración puede sacarse de contexto y convertirse en viral en una red social.
- Se corre el riesgo que la audiencia invente o interprete la información sobre él. En este sentido sienten que pueden perder el control de su reputación e incluso afectar a la de sus empresas.
- Las redes sociales en general, incluido LinkedIn, son entretenimiento, con un coste en dedicación de tiempo y atención muy grande y de cierta forma, una amenaza para la privacidad.
- No evidencian en sí ningún beneficio para un directivo, a menos que desee establecer un canal de comunicación con los clientes de la compañía. Sin embargo en ese caso, normalmente lo gestiona el área de comunicación de su empresa.
- La presencia en una red social implica una intensa y constante frecuencia de generación de contenidos, lo cual está fuera del alcance de cualquier directivo.
- La privacidad es un derecho que debe ser preservado con celo.
El otro lado de la moneda
Sin embargo el estudio también concluye que las redes sociales no ven con buen agrado la ausencia de un canal de difusión que permita la interacción con los altos ejecutivos de las compañías. Transmite una sensación de falta de transparencia y crea altos muros que dificultan el engagement entre las marcas que representan y sus propios consumidores.