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Para alcanzar el éxito, el primer paso es imaginarlo. Yo lo defino como soñar despiertos… muchas veces esto lo hacemos sin pensar que lo estamos haciendo. Ahora bien, ¿es posible visualizar el éxito de manera consciente? 

La respiesta es SÍ. Además, existen diversas técnicas que nos permiten visualizar el éxito y concretar nuestros objetivos.

Pero antes de continuar, retomo lo que decía al principio, yo lo defino como soñar despierto. Pero, ¡ojo! no se trata solo de soñar y vivir soñando; se trata de buscar un equilibrio entre lo que imaginamos con lo que hacemos, la acción.

Visualiza el éxito

¿Te has tomado un momento de tu vida para pensar qué sentirás cuando termines tu carrera?, ¿cuando por fin lances ese proyecto que tanto tiempo anda rondando por tu cabeza?, ¿cuando logres convertir tu idea en una empresa exitosa?

Si no lo has hecho, te invito a comenzar, porque visualizar esos hitos, esos éxitos, te ayudará a acercarte a tus objetivos. Visualizar lo que queremos conseguir tiene unos resultados realmente sorprendentes.

La clave está en la concentración

Sí, es fundamental la concentración, ya que es lo que hará que nuestros otros pensamientos nos distraigan y nos hagan perder el foco. Necesitas concentrarte para visualizar esa situación que de momento estará solo en tu cabeza, pero esperas que se plasme en la realidad.

Pon todos tus sentidos en la visualización

No debes buscar solo ver, sino también sentir. ¿Recuerdas esa sensación cuando has recibido alguna buena noticia?, ¿cuando lograste aquel trabajo que deseabas?, ¿cuando supiste que por fin tu último examen lo habías aprobado?, ¿cuando en tu empresa los resultados fueron mejores de los que se preveía? Por tu cuerpo pasaron un sinfín de sensaciones positivas que te encantaron. Bien, pues eso es lo que debes conseguir al visualizar.

Para que la visualización del éxito sea completa es muy importante que todos tus sentidos estén puestos en la visualización y todas tus emociones también, solo así lo que imaginas podrá ser lo más realista posible.

Visualiza lo que sientes

Si cuando algo te emociona y te hace feliz te pones nervios@, deja salir los nervios. Si la felicidad aumenta tus latidos, deja que tu corazón lata más rápido. Si eres de los que llora de felicidad, no retengas las lágrimas… Cada detalle que identifiques en tus emociones y sentimientos te ayudará a ver tu objetivo de una forma más clara.

éxito

Siento decirte que no, el triunfo y el éxito, no son gratis.

Especialmente ahora, que vivimos hiperconectados, podemos acceder a un sinfín de informaciones y contenidos que nos invitan a iniciar nuestro camino al éxito. Hasta aquí de acuerdo. Ahora bien, me sigue impactando como muchos «profesionales» siguen hablando del éxito como si se tratara de una simple cuestión de optimismo.

Podemos comparar el éxito con un gran iceberg. Lo que vemos sobre la superficie no es más que un pequeño porcentaje de la totalidad. Bajo lo que vemos, existe una gran masa compuesta de sacrificios, decepciones, disciplina, dedicación, esfuerzo, perseverancia, aprendizaje, errores

El coaching, te ayuda a definir tus metas y a crear una hoja de ruta que te permita, poco a poco, recorrer el camino que te separa de ellas hasta alcanzarlas. Pero no lo harás por arte de magia, así que parte del proceso implica que tomes conciencia sobre el esfuerzo que exige iniciar el camino hacia tus objetivos y de las herramientas que vas a necesitar para poder recorrerlo y finalmente cruzar cada una de las metas que te has marcado.

Esfuerzo, dedicación, autodisciplina y mucha energía son los ingredientes principales para la receta del triunfo. Muchos, ponen freno el entender que todo lo que hay que invertir, quizá, no les compensa. Demasiado energías para recompensas no inmediatas. Quizá. Es una decisión legítima. Y es que esto funciona así, uno no puede acercarse a sus rosas sin riesgo de pincharse con sus espinas.
Cada uno decide si sus rosas merecen tanto la pena como para soportar alguna que otra herida.

Continuamente recibimos mensajes que nos incitan a creer lo contrario. Hoy, estamos rodeados de mensajes publicitarios que nos invitan, a través de productos y/o servicios a «lograrlo sin esfuerzos»; «pagar sin darnos cuenta», etc.
Es un lenguaje atractivo, pero irreal, idealizado, incierto.

Para evitar abandonar en el primer intento, resulta fundamental esa toma de conciencia. y una profunda reflexión que responda a algunas preguntas importantes y muy relevantes. Pregúntate, ¿qué quieres lograr?; ¿realmente merece el esfuerzo que tendrás que hacer?; ¿realmente, hasta dónde estás dispuest@ a comprometerte para alcanzar tus metas?; plantéate la posibilidad de no lograrlo, ¿qué pasaría? Y, sobre todo, responde a esta pregunta, ¿cómo y en qué cambiaría tu vida si logras tus objetivos?

reuniones con éxito

Son muchos los aspectos que hacen que una reunión tenga éxito: prepararla de forma adecuada, seleccionar a las personas correctas para participar, etc.

Y de todos los pasos que se precisa dar para que resulte exitosa, tanto a la hora de preparar la reunión como al ejecutarla, las nuevas tecnologías nos pueden ayudar, facilitándonos diversas tareas. Hoy, os propongo algunas herramientas que yo mismo he probado y pueden ser muy útiles para hacer que nuestras reuniones tengan éxito:

Dropbox y Google Drive

Estados herramientas se pueden convertir en tus aliadas para evitar que la información se pierda. Te permitirán guardarla y acceder desde cualquier a toda esa información desde cualquier lugar.

Skype

Qué sería de muchos de nosotros sin Skype.
Cuando tenemos una reunión con alguien que se encuentra lejos, esta herramienta nos permite acortar las distancias. A través de videoconferencia, de una forma muy fácil e intuitiva podemos mantener una vídeollamada con cualquier persona, esté donde esté.

Rev

Aún me sorprende la función de esta aplicación. Y es que resulta tan útil.

¿Cuántas veces hemos asistido a una reunión y olvidamos las conclusiones a las que se ha llegado en ella? Si eres de los despistados a los que le pasa habitualmente, esta es tu aplicación, porque se encarga de transcribir el audio.

Con Rev, no habrá problemas si algo quedó en el aire o alguien olvidó especificar algún resultado o conclusión en el resumen post reunión.

Evernote

Un clásico que merece mención.

E una reunión siempre surgen ideas, propuestas, nuevas tareas… y mucho más que anotar para que nada se escape. Evernote permiten mantener tus notas e ideas bien organizadas. Además, la aplicación permite agruparlas de manera automática en la agenda personal.

 

El objetivo final de cualquier reunión es sacar provecho a lo planteado, expuesto y debatido. Y las nuevas tecnologías, en concreto las aplicaciones, nos pueden ser de gran ayuda para mejorar nuestra productividad y optimizar nuestro tiempo y tareas.

Seguro que utilizas alguna aplicación, ¿alguna de estas, quizá?, ¿o conoces otras que merezca la pena explorar porque te han resultado prácticas y efectivas?

 

 

exito

En los últimos tiempos escucho hablar con demasiada frecuencia de éxito. A veces, quizá, incluso con ligereza. Y lo cierto es que no se trata de un tema fácil porque entra en el ámbito de lo subjetivo, por lo tanto, cada uno de nosotros tiene un concepto y una manera de entenderlo.

También me encuentro con mucha frecuencia la creencia de que el éxito tiene que ver con el reconocimiento de los demás… Si me preguntan a mí, diría que sí, pero que se me queda escasa esa idea si no incluye una conexión con lo que nos apasiona, nos mueve, nos emociona, nos hace sentir bien; sin ello el éxito no es de verdad.
Además considero que el éxito no es algo que se alcance un día sin más. Es mucho más que eso, es una elección de vida, es algo que hay que cuidar, cultivar cada día…

Existen algunas claves básicas para que una persona logre materializar los resultados que quiere en su vida. Y es precisamente de ellas, o al menos algunas de esas claves, de lo que quiero hablar hoy:

La primera y sin la cual sería muy complicado ir hacia algún lugar es la conciencia. Saber quienes somos, qué es lo que nos apasiona y qué se nos da bien, es fundamental para dar sentido a nuestra vida y establecernos metas.

Otra de las claves es la claridad. Conocer nuestros valores, saber cuál es nuestra misión y tener claros nuestros objetivos.

Para desarrollar cualquier idea o proyecto necesitarás unos conocimientos determinados. Qué sabes y qué debes saber para poder seguir adelante son las primeras cuestiones que debes plantearte.

Hace falta coraje, enfrentarse a los miedos, mirarlos de frente y tirar siempre hacia delante dispuestos a superarlos.

La constancia es la diferencia entre lograrlo o no lograrlo. El éxito solo acompaña a aquellos que se ponen las pilas y se encargan de mantenerlas cargadas hasta que alcanzan sus objetivos.

El compromiso y la fidelidad, no solo con los compromisos que mantenemos con los demás, sino también con nosotros mismos, marcarán una de las diferencias.

Debe siempre haber coherencia. Lo que eres, lo que dices y lo que haces, debe ir en la misma línea.

La confianza es otra de esas claves. Si quieres alcanzar el éxito debes confiar al 100% en ti mismo y en tus posibilidades.

En un mundo laboral cada vez más competitivo, la creatividad se convierte en una seguro, la capacidad de generar nuevas ideas y soluciones cuando es necesario resulta vital.

 

 

 

éxito

Hace ya algún tiempo Fortune 500 realizó un estudio que les levó a entrevistar a una gran número de ejecutivos. El estudio dio como resultado que más de un 90% de los profesionales entrevistados atribuían su éxito más a su actitud que a cualquier otro factor o circunstancia. Esta es sólo una muestra más de que, para llegar tan lejos como deseamos, es fundamental tener una buena actitud.

Nuestra manera de pensar y ver las cosas afecta de manera sorprendente y poderosa a nuestro camino hacia el éxito. De hecho, si fuéramos más conscientes del poder de nuestra actitud a la hora de alcanzar nuestras metas y sueños, muy diferentes serían las cosas.

La manera en la que decidimos mirar y ver la vida determina claramente la manera en que la vida nos mira a nosotros. Y es que de nuestra actitud ante la vida depende la forma en la que nos relacionamos con ella… E inevitablemente lo que conseguimos y recibimos, depende de esa actitud que adoptamos y mostramos.

Si caminas por la vida esperando que a cada paso una piedra bloquee tu camino, es justo eso lo que vas a encontrar. Si esperas a cada paso lo peor, tu camino estará plagado de peor. Y del mismo modo, si miras desde un prisma positivo, serán cosas buenas las que recibas; y es que, cuando se mira la vida con optimismo y entusiasmo, la vida nos guiña el ojo incluso cuando nos toca afrontar circunstancias negativas, ya que nos enseñará a sacar lo mejor de ellas, utilizarlas como método de aprendizaje y entenderlas como algo que nos sirve para seguir adelante con más fuerza aún.

Ahora que comienza un nuevo año, te dejo aquí algunas características fundamentales para construir esa actitud adecuada para alcanzar el éxito:

Confianza en ti mismo/a

Si no confías tú en ti, nadie lo hará. Cree en ti, sólo así podrás demostrarte a ti y a los demás que tienes la fuerza suficiente para lograr cualquier cosa que te propongas.

Busca lo mejor de cada persona 

Dijo Albert Einstein, y ¡cuánta razón tenía! ❝Si juzgas a un pez por su habilidad para trepar árboles, vivirá toda su vida pensando que es un inútil❞. Todos somos buenos en algo, busca siempre y a ser posible, potencia, lo mejor de cada persona con la que te relacionas.

Busca la oportunidad

La vida, el día a día, está lleno de oportunidades que pasamos por alto y desaprovechamos. Sé más curioso/a, trata de ver un poco más allá, repara en los detalles… busca siempre la oportunidad.
Allá donde los demás sólo sean capaces de ver problemas, practica la habilidad de encontrar soluciones. Cuando todos crean que es imposible, demuéstrales que a imposible le sobran las dos primeras letras.

Sé generoso/a 

Practica el deseo de dar, de ofrecer… la generosidad es un gran impacto positivo. No recuerdo de dónde la he sacado, pero siempre llevo en mi mente esta frase ❝Lo que das, te lo das. Lo que no das, te quitas❞.

Perseverancia

Nadie dijo que el camino hacia el éxito sea un camino fácil. Pero lo que sí es seguro es que para llegar al éxito, es necesario aferrarse a los sueños y no soltarlos jamás.

Comienza a asumir que tu vida es tu responsabilidad

Tu vida e tuya y lo que ocurra con ella sólo depende de ti. Tú eres quien decide hacia dónde la quieres dirigir…
Nunca verás nada positivo si no asumes que la responsabilidad de dar el primer paso e iniciar el camino es tuya… Es fundamental para alcanzar tus sueños que tomes conciencia de que tus resultados, lo que obtienes en la vida, es sólo la consecuencia de tus decisiones y elecciones.

¡Feliz Año!

idea-plan-actionNuestra faceta profesional es, sin ninguna duda, una parte importante de nuestra vida. Todos podemos mirar atrás y analizar el recorrido que hemos hecho hasta ahora… Sin embargo, mirar hacia el futuro y saber hacia dónde ir, no resulta tan fácil; pero de ello depende el nuestro futuro. 

La improvisación, hoy, no es la mejor opción para los profesionales. Un plan siempre nos ayudará a marcar el camino a seguir… 

Dirigir o redirigir el sentido de nuestra carrera profesional, con todas las decisiones que ello implica, es una tarea compleja. Y tener una planificación nos permitirá hacerlo de una manera más consciente, más ordenada y más eficaz. 

Si todavía no lo tienes, es hora de que elabores tu propio plan estratégico de desarrollo profesional. Te lo acabarás agradeciendo.

Yo te propongo dar tres pasos que te permitirán comenzar a andar en este sentido:

1. Visualiza tu destino

Míralo como un viaje. Cuando sales a la carretera, defines tu destino, marcas tu ruta, prevés… Con tu carrera, haz lo mismo, fija tu punto de mira en el lugar al que quieres llegar. De esta manera conseguirás saber dónde quieres estar a largo y medio plazo.

Y mientras, ten siempre a mano una lista de los pequeños objetivos que te permitirán avanzar hacia tu meta. Si en algún momento se te olvida por que has empezado, consúltala; si en algún momento se te pasa por la cabeza desistir, consúltala y observa todo lo que has conseguido ya.

2. Haz un análisis de las deficiencias

Conocer nuestros puntos fuertes es fundamental para potenciarlos. Pero también es importante que conozcas los puntos más débiles para saber cómo afrontarlos…

Si es necesario, realiza una lista de habilidades relacionadas con tu sector o actividad profesional. Una buena forma de conocer tus puntos fuertes y débiles en este sentido, es dotar a cada una de esas habilidades de una puntuación… El resultado te permitirá saber y decidir si debes potenciar y enfocar tu destino hacia un trabajo que te permita potenciar esos puntos fuertes o si debes trabajar más los débiles para llegar a donde quieres.

3. Realiza un plan de desarrollo

Llegados a este punto debes tener ya muy claro adónde quieres llegar y lo que necesitas aprender y hacer para lograrlo. Sin embargo, sólo con eso no basta, contar con un plan profesional es algo más complejo…

Por un lado, debes especificar los pasos que irás dando. Quizá en lugar de potenciar tus habilidades lo que necesitas es adquirir habilidades nueva, por ejemplo. O es posible que tus objetivos te obliguen a formarte en un campo concreto, etc.
Además de lo que necesitas hacer para alcanzar tus metas, es importante que definas cuándo lo vas a hacer… Un buen plan incluye plazos.

 

Y para terminar, ten en cuenta que esta es la teoría, en la práctica pueden surgir imprevistos, puede que no todo salga como habías planeado, que no avance a la velocidad prevista, etc. Por eso, un plan no es un mandamiento, es una guía sujeta a cambios. Revísalo a corto y largo plazo para comprobar qué objetivos has alcanza dentro de los plazos y qué no has conseguido y, si es necesario, modifica la estrategia las veces que haga falta.

 

Fracaso-exito

Las diferencias entre éxito y fracaso, a priori, pueden parecer obvias. Sin embargo, os aseguro que no lo son tanto. De hecho, si hacemos una reflexión sobre el verdadero significado de la palabra éxito, veremos que no es tan fácil de definir como parece.. Por ello quiero hablaros de lo que, a mi modo de ver, son los tres componentes básicos del éxito:

1. El éxito no es la meta, es el camino

Teniendo esto en cuenta, para alcanzar el éxito se deben dar dos circunstancias:

  1. Que tengas una meta, un objetivo.
  2. Que te encuentres en movimiento, en el camino que te lleva a alcanzar tu meta. Para que haya éxito es imprescindible haber tomado la decisión de pasar a la acción.

Nadie ha dicho que sea fácil, ni mucho menos cómodo. Si el éxito es el camino, lo primero que debes saber es que el camino no tiene final; no importa lo lejos que hayas llegado, en el momento que dejes de caminar, dejarás de tener éxito.

Y ese camino, está para modelarte, para transformarte de manera que te alejes de la mediocridad y logres destacar.

2. Es un constante proceso de descubrimiento y desarrollo

Con el tiempo, con la experiencia y con el propio caminar, vamos descubriendo nuevas cosas que amplían nuestra visión y también nuestros propósitos. Es un constante proceso en que debemos desarrollar nuestro máximo potencial. Mejorar cada día en busca de la excelencia es la clave.

3. Este último punto lo estableces tú

Lo cierto es que mis conocimientos y experiencias, como los de cualquier persona, son limitados; y probablemente son también muy diferentes a tus propios conocimientos y experiencias. Es por ello que cometería un error si tratara de definir de una manera exacta o perfecta lo que es el éxito.
Sólo de manera individual y de acuerdo a nuestras propias experiencias, pasiones, necesidades, inquietudes… podemos completar este tercer componente básico del verdadero éxito, del éxito real. Por eso quiero que seas tú mismo/a quien complete esta reflexión… ¿Cuál es tu concepto del éxito?, ¿qué característica precisas para alcanzar el éxito realmente?

 

delegarDelegar es para cualquier directivo una de las tareas más delicadas. Y es que, al delegar una tarea o actividad se encomienda a otra persona para que la ejecute, con los riesgos y consecuencias que ello conlleva.

Cuando delegamos a otra persona una actividad o tarea dentro de una organización, automáticamente estamos otorgando a esa persona la posibilidad de realizarla en nuestro nombre, del mismo modo que estamos asumiendo la responsabilidad de algo que no controlamos totalmente, ya que no lo hacemos directamente.
Teniendo en cuenta lo anterior, es evidente que para que la delegación de una tarea sea efectiva y eficaz, es necesario que exista una confianza previa en la persona a la que vamos a encomendar la actividad. Es imprescindible que al delegar, exista la confianza y seguridad suficiente de que esa persona cuenta con la capacidad, interés y predisposición necesaria para ejecutar la tarea con la exigencia y calidad que requiere.
Es por esto que, a pesar de su aparente sencillez, resulta tan complicado delegar…

¿Qué ventajas ofrece delegar?

Cualquier proyecto exige el desarrollo de múltiples tareas que, los límites del tiempo, y en ocasiones también otros factores, impiden que una sola persona pueda realizarlas sola. Aún así, son frecuentes los casos de profesionales al mando de un proyecto o directivos que trabajan al cien por cien de sus posibilidades y capacidad, lo que a la larga puede suponer un inconveniente más que una ventaja a la hora de alcanzar los objetivos.

Sin embargo, cuando se delega una tarea a la persona adecuada, se produce un efecto multiplicador de las capacidades de las personas. Permite una mayor y mejor organización, ampliando las posibilidades y capacidades a través de la participación y colaboración. Delegar, sin ninguna duda, permite aumentar la calidad y la cantidad de los resultados que se obtienen dentro de un proyecto u organización.

Las claves para una delegación efectiva y eficaz:

  • Delegar no es olvidar. Delegar es encomendar y trasladar a otra persona una tarea, pero ello no implica el olvido de la misma, es fundamental realizar un seguimiento y seguir controlándola.
  • Formación. Decía antes que la confianza es fundamental a la hora de delegar. Pues bien, para poder tener esa confianza absoluta en las personas que colaboran en un proyecto, es muy importante su formación, por lo que invertir todos los recursos posibles en formación siempre será positivo.
  • Pregúntate, en cada tarea, si es realmente necesario que la hagas tú. Pregúntate a ti mismo/a si realmente es conveniente que la realices tú o si es una tarea que puedes delegar. Valora las posibilidades y opciones… Y si finalmente conviene delegarla, valora qué persona la puede desarrollar, si hay alguien en tu entorno capacitado y en quien confíes, adelante; si no, valora quién, tras un período de formación, podría realizarla.
    Al hacerte estas preguntas con cada una de tus tareas habituales, te darás cuenta que realmente muchas son delegables, y encomendárselas a otras personas incrementarían tu potencial.
  • Marca objetivos. Establecer objetivos claros es la mejor manera de conseguir que una delegación sea efectiva, ya que con unos objetivos claros, es posible medir y cuantificar. Y esto permite conocer la evolución del proyecto en general y también el compromiso de cada una de las personas que trabajan en él.
  • Crea una atmósfera de confianza. Es importante crear un ambiente libre de miedo en el que cada una de las personas que participan en un proyecto se sientan cómodas y seguras a la hora de desarrollar las tareas correspondientes, y sean capaces de tomar decisiones y actuar sin miedo a la equivocación.